Eco, es una oréade (ninfa de la montaña) del monte Helicón que amaba su propia voz. Fue criada por ninfas y educada por las Musas. Era una joven parlanchina y alegra que entretenía a la diosa Hera, esposa de Zeus, mientras éste aprovechaba para cometer adulterio. Cuando era averiguó el papel de Eco, se enfureció y la condenó a repetir el final de todas las frases que escuchara. Eco, entonces, se refugió en una cueva. En una ocasión la ninfa vio al bellísimo Narciso y se quedó prendada de él, pero no se dejo ver.
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| Nicolas Poussin: Eco y Narciso, h. 1629-1630, Museo de Louvre, París, Francia |
Cada día lo seguía a distancia, hasta que un día pisó una ramita y el joven la descubrió. Aunque intentó hablar con ella, Eco sólo repetía sus palabras y, finalmente, Narciso se rió y se marchó. Eco se escondió de nuevo en la cueva, donde se consumió de pena y llego a convertirse en parte de la roca.
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