Memento mori
...y no halle cosa en que poner los ojos
que no fuera recuerdo de la muerte.
Quevedo
I
Es la sombra que viene,
La garra preparada
Para el golpe certero,
La mirada en alerta
Que busca, sigue, acecha.
Nada se escapa al ojo
Implacable y absorto.
Nada al cruel arrebato.
Cuando la furia cae
Rasgando piel y carne,
Y la vida se escapa,
Y la sangre se amansa,
Y se instala la muerte;
Entonces comprendemos
Que el mayor enemigo,
El más voraz y aleve,
Nos hiere siempre el último
Desde adentro del pecho.
II
Ya no te creo, ciudad, el paraíso,
El eterno jardín donde la dicha enciende
Sus fuegos de San Telmo.
Tampoco te concibo como la cuna de las ilusiones,
O el rincón iluminado
Por las luces secretas del deseo.
Caída la venda de los espejismos,
Eres tan sólo ese paisaje sórdido
Donde rufianes y tahúres
Se tasan mutuamente,
Mientras los mismos tiburones
Se mastican sin pausa
Con sus dientes de oro.
La araña teje su tela, indiferente,
Mientras tanto.
Tarde o temprano,
Cualquiera ha de caer.
Carmen González Huguet
Nació el 15 de noviembre de 1958 en El Salvador y es una reconocida poetisa y catedrática de su país. Su estilo impecable y su fructífera obra la han llevado a brindar clases y seminarios en importantes universidades, lo que le ha permitido hacer más conocida su obra. Además, ha ganado importantes premios como el de Juegos Florales Hispanoamericanos de Quetzaltenango.
Algunas de sus obras poéticas publicadas son Las sombras y la luz, Testimonio y Locuramor. Asimismo, ha escrito narrativa, donde se destaca su novela corta En busca del paraíso y su novela policial Flores de papel; ambas la han hecho merecedora de premios literarios.
Carmen realiza también trabajos de investigación, intentando acercarse a las bases de la literatura de San Salvador. Su intensa labor en favor de las letras, su estilo que muchos consideran deslumbrante y su pasión por la poesía la han convertido en una de las poetisas más importantes en la historia de su país.
No hay comentarios:
Publicar un comentario