La grieta y la luz
Un camino de perdón
Encuentro
Madrid
2023
162 págs.
A la edad de 34 años, el comisario Luigi Calabresi fue asesinado en Milán por militantes de Lotta Continua. Minutos antes salía de su casa después de despedirse de su mujer, Gemma, que estaba embarazada de su tercer hijo.
«Vivimos sin saber cuándo será la última vez de algo; nos despedimos con una inconsciente indiferencia un día tras otro. Tampoco nuestra despedida escapó a esta regla».
Son palabras de Gemma Calabresi que describen ese último momento junto a su marido, poco antes de un asesinato político que se haría famoso en toda Italia. Animada por su entorno, esta mujer se decidió a escribir su testimonio de vida en La grieta y la luz, un libro que describe este camino de perdón.
La reconciliación de esta joven madre con aquellos que dispararon por la espalda al amor de su vida no fue evidente en un inicio. Ella misma confiesa su deseo de venganza.
Gemma fue una víctima de un periodo duro de la historia italiana que se conoce como los «Años del Plomo». Fueron unas décadas en las que no dejaban de sucederse las huelgas, protestas y asesinatos de grupos extremistas de derecha e izquierda.
«Nunca he hablado de cuánto me esforcé usando la cabeza», confiesa, «y cómo me di cuenta mucho después de que todo ese esfuerzo había sido en vano; porque el perdón es un movimiento autónomo del corazón».
Ahora publicamos en español esta historia transida de esperanza. Irene Villa escribe el prólogo de esta edición, con ecos que nos recuerdan a nuestra propia historia. «Comulgo con su filosofía de la no violencia. Que este libro sirva para que jamás se olvide lo que tantas personas vivieron para que después, por fin, reine la paz».
Después de vender miles de ejemplares en toda Italia, La grieta y la luz será presentada el próximo 8 de marzo, Día de la Mujer. El acto tendrá lugar en la Fundación CEU San Pablo de Madrid, en una entrevista que realizará la directora de cultura de El Debate, María Serrano, a la autora.
Gemma Capra nació en Turín. En 1969 se casó con el comisario Luigi Calabresi, con quien tuvo tres hijos: Mario, Paolo y Luigi. Tras el asesinato de su marido (17 de mayo de 1972), se dedicó a enseñar religión en la escuela primaria Pietro Micca de Milán. En 1981 se volvió a casar con el artista Tonino Milite y tuvo un cuarto hijo, Uber.
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