Han corrido ríos de tinta sobre la visión de este "hombre sacrificando un cordero". Algunas eruditas interpretaciones se fijan en la amplitud de las mangas, la vestidura exterior morisca o aljuba que porta , en el grosor de sus labios, en sus apuntadas albarcas y todo lo que ello implica...
Hombre sacrificando un cordero, obra del Maestro de Olorón, siglo XII, puerta sur de la iglesia de Santa María la Mayor, Uncastillo, Cinco Villas de Aragón.
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