Este diminuto cuadro pintado por Delacroix es una de las joyas del Museo Thyssen-Bornemisza. Está basado en una anécdota que aparecía en el libro Vie des dames galantes de Pierre de Brântome, escrito en el siglo XVI. Según esta historia, el duque Luis de Orléans, hermano del rey Carlos V de Francia, quiso mostrar un día a su antiguo chambelán, Aubert le Flamenc, los encantos de su amante, teniendo la precaución de ocultar el rostro de la chica con una sábana para preservar su intimidad. El chambelán le dijo al duque: “una moza muy guapa, mi señor”, sin percatarse que estaba admirando el cuerpo de su esposa, Mariette d'Enghien, con la que el duque estaba teniendo una aventura.
El duque de Orléans mostrando a su amante (h. 1825-1826), Eugène Delacroix. Óleo sobre lienzo. Museo Thyssen-Bornemisza, Madrid, España |
Es una obra típicamente romántica, basada en una historia literaria ambientada en la época medieval (para los románticos, lo medieval llegaba hasta el Renacimiento). La pintura de Delacroix se inspira en los artistas venecianos del siglo XVI, como Veronés o Tiziano, dando más importancia al color que al dibujo. Sus obras no son tan minuciosas como las de los pintores neoclásicos, pero aun así consigue representar detalles de gran delicadeza con unas pocas pinceladas, como las jarras y las bandejas que se ven al fondo, el brillo dorado de los bordados del dosel, la liviana sábana translúcida, el contraste de luces y sombras del cuerpo de la señorita o el delicioso color de sus nalgas rosadas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario