Manuel Hugué (Barcelona, 1872 - Caldas de Montbui, 1945) fue un pintor y escultor español, destacado representante del novecentismo catalán de principios del siglo XX. Su obra puede resumirse como una síntesis de clasicismo y primitivismo dentro de la modernidad. Es ampliamente citado con el nombre coloquial de Manolo. Supo conciliar la tradición y la vanguardia en un tipo de obras que poseen un carácter muy personal y un estilo inequívoco.
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| Rosa (1935). Terracota. Museo Centro de Arte Reina Sofía, Madrid |
Esta figura de terracota, rosa, constituye un claro ejemplo de la manera de trabajar de Hugué. Formas rotundas y macizas hacen recordar la escultura de épocas anteriores, aunque es evidente que existe una suerte de tosquedad buscada que no puede relacionarse con obras clásicas. Manuel Hugué se instaló en la población de Ceret, al sur de Francia, en 1910 y allí supo congregar a su alrededor a un nutrido grupo de artistas, entre los que se encontraban los cubistas como Picasso y Gris. A pesar de los contactos que tuvo con el cubismo, Manolo no varió apenas su lenguaje escultórico y se mantuvo fiel a la temática del desnudo femenino, así como a la concepción mediterraneista, aún cuando en alguna obra pudiera percibirse cierta tendencia a la geometrización.
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