Como ya no paso mi vida en la mesa sino en la cocina. Mi misión: ofrecerte una receta sencilla inspirada en una película o una serie. Una visión para su noche, con el fin de conciliar los alimentos biológicos e intelectuales.
¿Por qué Marco Pagot, un piloto de avión del período de entreguerras, se transformó en un cerdo? La pregunta que quema los labios durante toda la película nunca se hace y quedará sin respuesta, porque finalmente no importa. De todos modos, recordemos que la expresión "porco rosso" designaba en ese momento a los comunistas italianos, luego, de manera más general, a todos los opositores del régimen fascista, paradójicamente haciendo de Porco Rosso (Kurenai no buta), estrenada en 1992, la película más anclada históricamente en la realidad de Hayao Miyazaki. Los nombres de Marco Pagot y Gina, su hermosa amante secreta, son reales: se refieren a los creadores del estudio Marco y Gi Pagot, con quienes Miyazaki trabajó para la serie Sherlock Holmes y, por cierto, hijos del creador de Calimero!
Porco Rosso no vuela en una escoba como Nicky, la aprendiz de bruja (Majo no takkyûbin, 1989), sino en un hidroavión rojo. Apasionado por la aviación, un virus transmitido por su padre, un ingeniero aeronáutico, Miyazaki nombró a su estudio de animación Ghibli en homenaje a Caproni Ca.309 Ghibli, un avión monoplano bimotor de la aviación italiana en la Segunda Guerra Mundial: echamos un vistazo además, el nombre Ghibli escrito en el motor de recuperación que permitirá que el hidroavión dañado de Marco vuelva a volar. Esto solo será posible después de fabricar nuevas alas. Pero en la fábrica, solo hay mujeres en las máquinas. Frente al plato humeante de estos cocineros trabajadores que con alegría sirven generosos platos de espagueti al ragù, hay una oración divertida: "Perdón por hacer un avión de combate con trabajo femenino"...
Dado que las ventas de pasta han aumentado en más de un 196% en las últimas semanas, es probable que tengan algunos paquetes por delante. Y que ya han puesto en el menú esta semana pasta boloñesa, cuya guarnición es mucho más que un trozo de carne picado con salsa de tomate. En Emilia-Romaña, nunca hemos comido espagueti con salsa boloñesa, sino tagliatelle al ragù. Desde esta semana, los niños han revisado la semejanza de los triángulos o la historia de las religiones monoteístas, es su turno de hacer su tarea y, por lo tanto, revisar tu boloñesa, una de las recetas más populares y manidas del mundo.
Ya deberíamos decir pasta al ragù boloñés, porque hay otros ragù (sí, la palabra es de origen francés y se pronuncia igual) en Nápoles, Catania y en todas partes de Italia. Sin embargo, no es necesario sacar la receta real de su abuela italiana: la Accademia italiana della cucina tuvo la buena idea de depositar en 1982 la receta "oficial" de esta legendaria salsa en la Cámara de Comercio Bolonia.
Puede sorprenderle porque hay mantequilla, carne de cerdo, para terminar en el estómago de Porco Rosso, y leche pero no aceite de oliva: en el norte de Italia, ¡cocinamos rico, rico! Nada difícil para que tenga éxito, aparte de cortar finamente las verduras del sofrito, que son el alma de las salsas italianas. Si no tienes apio en la mano, saca la botella de sal de apio que tiene guardadas tus especias para hacer nuestra receta de curry. El ingrediente más importante aquí es el tiempo: 30 minutos de saltear cuidadosamente de las verduras, 2 horas de cocción lenta y adición gradual de leche, lo que dará como resultado una salsa suave. Para la pasta, siempre elija pasta larga, cerraremos los ojos. ¡Pero es con tagliatelle como está mejor!
Pasta boloñesa
Ingredientes:
Para el sofrito
- 1 cebolla
- 1 zanahoria
- 1 tallo de apio
- 1 diente de ajo
- 30 g de mantequilla
Para la salsa de ragù
- 300 g de carne picada de vaca
- 100 g de panceta (u otra charcutería de cerdo disponible, como tocino o un poco de jamón crudo)
- 20 cl de salasa de tomate
- 1 vaso de vino blanco o tinto
- 1 vaso de caldo o agua
- ½ vaso de leche (entera o semidesnatada)
- Sal fina y pimienta recién molida
Para la pasta
- 400 g de pasta seca larga: preferiblemente tagliatelle, fettucine o spaghetti, como Porco rosso
- 1 puñado de sal gruesa
Preparación:
Preparar el sofrito:
Pelar y pelar las verduras. Cortarla en dados pequeños. Derretir la mantequilla en una cacerola o sartén a fuego lento. Agregar las verduras, dorarla durante unos minutos sin quemar la mantequilla.
Cortar el cerdo en trozos muy pequeños (panceta, un poco de jamón, etc.). Añadir al sofrito y cocine suavemente a fuego lento durante 30 minutos.
Añadir la carne picada. Deglase con el vino, raspando bien los jugos de cocina.
Agregar la salsa de tomate, el caldo o el agua, la sal y la pimienta. Llevar a ebullición, tapar y cocinar durante al menos 30 minutos.
Mezclar, luego añadir un poco de leche. Cubra y continúe cocinando durante 1 hora 30 minutos, añadir gradualmente la leche y remover varias veces.
Cocinar la pasta en agua hirviendo con sal, hasta dejarla al dente. Escurrirla, reservando un poco de agua para cocinar.
Agregar la pasta sobre la salsa, mezclar, si es necesario, añadir una pizca de agua de cocción. Rectificar de sal y pimienta.
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