En la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes, se inauguró el portal de Luis Hernández (Lima, 1941-Buenos Aires, 1977), dirigido por Elena Zurrón Rodríguez. Luis Guillermo Hernández publicó en vida tres poemarios Orilla (1961), Charlie Melnik (1962) y Las constelaciones (1965), pero su obra poética ha continuado creciendo desde su muerte gracias a la multitud de versos aparecidos en cuadernos confeccionados por el mismo o en diversos materiales como servilletas, cartones, partituras, discos, fotografías o libros, todos ellos escritos a mano con una caligrafía y una voz poética única.
Esta actitud casi marginal ha generado una leyenda urbana en torno suyo, porque se negó a publicar más libros y se dedicó a llenar cuadernos que regalaba a sus amigos. En dichas intervenciones, este poeta -médico de profesión- dejaba volar su creatividad fusionando su idea de la poesía con música, pintura, medicina o astronomía. Se han llegado a encontrar más de 70 cuadernos o documentos, pero queda la sensación de que faltan algunos que serán irrecuperables, lo cual hace que la dimensión de su obra sea desconocida.
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