La obra de Gustavo Torner, uno de los fundadores del Museo de Arte Abstracto de Cuenca, es siempre abstracta, , tanto si se desarrolla en el ámbito de la pintura como en el de la escultura. Torner es un artista que ha sabido mantenerse fiel a un lenguaje marcado por la austeridad y el rigor de la geometría. Sus pinturas son el más fiel reflejo de ello, tanto que las composiciones se atienen a esquemas de carácter geométrico, entre los que prevalecen las estructuras cuadradas y rectangulares. Por otra parte, el color es aplicado con un criterio sumamente estricto y, aún cuando existan obras maracadas por los violentos contrastes entre colores oscuros y claros, por lo general opta por soluciones bi- o tricromáticas a lo sumo.
Los complementario VI (1993). Oro sobre acero, y acero lacado. Colección Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, Madrid |
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