Los enemigos del emperador Heliogábalo, cuyo nombre real era Vario Avito Basiano, afirmaban que le gustaba que le pegaran antes de practicar la sodomía; que se ofrecía en los burdeles; que seleccionaba a sus favoritos en función del tamaño de sus atributos y los recompensaba con cargos públicos.
De su madre se dijo que vivió como una meretriz, y que el nombre de Vario le venía al emperador porque fue concebido con el semen de varios hombres.
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| Las rosas de Heliogábalo (1888), Sir Lawrence Alma-Tadema Cuadro que retrata cómo asfixió a invitados de una cena con una masa de «violetas y rosas» que lanzaban desde arriba |
Uno de estos chismorreos afirmaba que se hacía pasear desnudo en un pequeño carro tirado por dos o cuatro mujeres bellísimas desnudas.
Según Don Casio, preguntó a sus médicos si podían introducir una vagina de mujer en su cuerpo por medio de una in cisión, y les prometió una recompensa enorme si lo hacían.
La Historia Augusta recoge muchos de estos chismes, como que besaba las partes pudendas del bello Hierocles para celebrar las festividades de Flora, la diosa de las flores, y que afeitaba el pubis y el escroto de sus efebos con la misma navaja con la que se afeitaba.
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