Los historiadores Suetonio y Tácito recogieron en sus obras la existencia de los spintrias, servidores que se dedicaban a inventar todo tipo de actividades lascivas y cópulas monstruosas para entretener a los emperadores.
Según ellos, Tiberio disponía de niños de tierna edad a los que llamaba "mis pececillos", que habían sido adiestrados para jugar entre sus piernas mientras se bañaba.
No hay comentarios:
Publicar un comentario