Cuando un padre fallecía, su hijo mayor le cerraba los ojos tras comprobar que había muerto. A continuación lo llamaba por su nombre por última vez.
El cortejo fúnebre estaba formado por los músicos, las plañideras y un grupo de hombres con objetos relacionados con la vida del difunto. Si había sido un jefe militar, se recordaban sus victorias y sus batallas más gloriosas.
En el cortejo fúnebre de los nobles participaban clientes (los protegidos del difunto o actores que llevaba una máscara la cual imitaba los antepasados del fallecido, así parecía que venían a recibir a su descendiente. Este ius imaginum, "derecho de imágenes", estaba reservado a los patricios.
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| Traslado del féretro |
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